PREMIO GRÀFFICA 2014
Francesc Capdevila, más conocido como Max (Barcelona, 1956), es una de las figuras más importantes del cómic español. Todo un clásico de las viñetas, todavía en activo.
Aficionado a dibujar desde niño, ya emborronaba los libros en el parvulario. De esos años de infancia recuerda las historietas que leía en el TBO, el Pulgarcito, el Pumby, Tintín y Asterix.
Sus primeras historietas llegaron en 1973, con el fanzine contracultural El Rrollo Enmascarado, primero en España, al que también pertenecieron Nazario y Mariscal, entre otros. Publicación que les llevó a algún que otro litigio judicial, y que lejos de frenarles, supuso un estímulo de las ansias revolucionarias de aquel plantel de subversivos; Max acaba de descubrir el cómic underground y la obra de Robert Crumb y en 1979 formó parte del equipo artístico fundador de El Víbora.
En el cómic, su terreno más frecuente y conocido, es el padre de personajes tan delirantes, surrealistas y entrañables como Bardín, Peter Pank o el diablo cuentacuentos. Su álbum Vapor de 2012 es sin duda uno de sus mejores trabajos y reflejo de una madurez en estilo y fondo, siempre filosófico.
«Mi obra es como un poliedro, ofrece caras diversas según desde dónde se llegue a ella»
Max
El trabajo como ilustrador de Max abarca carteles, libros, revistas y discos, y le han convertido en un ilustrador reputado a nivel internacional. Entre sus trabajos más importantes destacan portadas para la revista The New Yorker (USA), el diseño de un reloj Swatch (1997), la creación de la mascota del centenario del F.C. Barcelona (1998) y la realización de un corto de animación de la serie Microfilm (Canal Cinemanía, 1999) que fue premiado con un Laus en el 2000.
Su trabajo como ilustrador de libros infantiles le ha valido diversos premios, entre los que destaca el Premio Nacional de Ilustración del libro infantil y juvenil concedido por el Ministerio de Educación y Cultura en 1997.
Max ha dibujado portadas de discos como Una ópera egipcia del grupo granadino Los Planetas, ha realizado muchas ilustraciones para libros infantiles y para libros de filosofía, lo que demuestra que tiene cintura para moverse en cualquier terreno. En 2014 recibió un Premio Gràffica.
En 2016 realizó El tríptico de los encantados (Una pantomima bosquiana), el primer cómic realizado por encargo del Museo del Prado con motivo de la celebración del V centenario del Bosco en la principal pinacoteca española.
